LO SABES?...LO SABES?....LO SABEEEES????

Mírame a los ojos y dime… ¿Sabes de verdad lo que necesita tu piel?

Probablemente piensas que si, pero a lo mejor desconoces que cuidados requiere por sus especiales características…
Así que después, mírate en el espejo e identifícate, para cuidarte del modo adecuado….

Piel grasa:
Los granitos, los poros dilatados y la tendencia al acné, suelen ser el vía crucis diario de este tipo de epidermis, gruesa y resistente, que por obra y gracia de su abundante secreción sebácea, sin embargo, se mantiene joven y elástica, frenando la acción agresiva de los agentes externos.
La contrapartida es su tendencia a la flacidez, y su aspecto brillante.

Cuidados:
Limpieza sin cuartel por la mañana y por la noche, preferentemente con productos que se eliminen con agua, y mejor que mejor, con agua fría, a fin de prevenir la flacidez.
Una vez a la semana se aplicara además una mascarilla desincrustante, y en cada ocasión hay que finalizar la operación con un tónico astringente.
Hidratación con un producto ligero y preferentemente específico, capaz de matar los brillos.
Maquillaje siempre con efecto mate.

Piel normal:
Tiene los poros cerrados y un aspecto aterciopelado, fino y suave al tacto, pero su punto flaco es la falta de capacidad de protección frente a las agresiones externas.

Cuidados:
Limpieza diaria con un desmaquillante suave en leche o en gel, finalizando con un tónico sin alcohol.
Hidratación: durante el día una crema hidratante o un fluido, con agentes de protección.
Reparación: por la noche, una crema reparadora, nutritiva y regenerante, y cada dos semanas una mascarilla de semejantes características.

Piel seca:
Su superficie es muy fina y con tendencia a arrugarse con el paso del tiempo y con los gestos de expresión, por culpa de la escasa secreción de sus glándulas sebáceas y por su débil película hidrolipidica, causante de que la humedad natural se evapore rápidamente.

Cuidados:
Limpieza diaria con desmaquillantes de máxima suavidad, finalizándola con un tónico calmante y estimulante.
Nutrición y protección durante el día, ya que no basta con un producto hidratante.
Reparación y antiarrugas por la noche y una vez a la semana una exfoliación para eliminar las células muertas y el aspecto apagado y cansado. Son recomendables al máximo las mascarillas hidratantes, dos veces en semana por lo menos.

Piel Mixta:
Suelen mostrar una parte central más grasa y con impurezas, en la barbilla, la nariz y la frente, y otra seca en los laterales, con poros cerrados y tendencia a la descamación. Obviamente, los cuidados destinados a cada una, son idénticos a los de piel grasa y piel seca.

Piel Sensible:
Se reconoce fácilmente cuándo al pellizcarla ligeramente, enrojece con rapidez y así permanece bastante tiempo. Puede ser grasa o seca, pero siempre, tremendamente vulnerable al frío, al viento, y a las agresiones externas.

Cuidados:
Se eliminan los peeling, se utilizan leches limpiadoras suaves y tónicos sin alcohol y calmantes. Se siguen los cuidados correspondientes a su morfología (grasa o seca), y ¡lo más importante!, Hay que utilizar siempre un factor de protección total.